
En este post encontrarás
La titulación de primeros auxilios es obligatoria para ser madre de día
Debemos saber desde qué tiene que contener un botiquín, hasta cómo tratar una simple herida
Soy madre de día, pero lo que os voy a contar sucedió fuera del proyecto. Uno de los peores momentos de mi vida ocurrió hace exactamente ocho meses. En pleno confinamiento, una tarde que se presumía como otra cualquiera, estábamos en casa preparándonos para los aplausos de las ocho, cuando vi a mi hija de 9 años comiendo un chupachups. Reconozco que soy anti caramelos, chupachups y golosinas similares, pero hasta esa tarde no reparé en la razón de por qué no me gustan nada y casi que, desde entonces, no entran en casa.
Os cuento lo que pasó. El caramelo que tenía en la boca se desprendió del palito y ella empezó a chuparlo. De pronto, algo de lo que estábamos hablando le hizo mucha gracia y comenzó a reír sin parar con el trocito de caramelo en la boca.
De la manera más absurda, se le fue por mal sitio. En ese momento, su cara cambió. Se quedó pálida. De una forma instintiva se llevó sus manos al cuello y comenzó a hacer señas como de que se estaba atragantando.
Su padre y yo nos miramos angustiados y supimos que debíamos actuar con celeridad. Estoy segura de que, de no haber tenido conocimientos de primeros auxilios, mi primera reacción habría sido darle golpes en la espalda, pero eso es justo lo que en todas las formaciones dicen que JAMÁS hay que hacer. ¿La razón? Porque el trocito de caramelo puede instalarse aún más abajo y volverse más peligroso para la niña.
Saber reaccionar es una cuestión de supervivencia
Entonces empecé a animarla a toser sin tocarla, pero no funcionaba. Seguía con las manos en su cuello y yo estaba paralizada y angustiada por la situación. Ver a tu hija así es una sensación terrible, os lo aseguro. Pero entonces mi instinto salió y no lo pensé dos veces. Me puse a su altura y comencé a realizar la maniobra de Heimlich hasta que comenzó a toser y pudo expulsar el minúsculo trozo de caramelo que se había quedado atrapado en su glotis.
Fueron segundos de auténtico pánico en los que te das cuenta de que todo el mundo debería tener conocimientos de primeros auxilios, porque nunca se sabe en qué situación los vas a necesitar.
Las madres de día somos las únicas responsables de 4 niños/as
Las madres de día estamos expuestas a cualquier situación que se pueda dar con los niños y niñas de nuestras iniciativas. Desde atragantamientos comiendo, hasta caídas en el parque o cualquier accidente doméstico.
Por supuesto, contamos con un seguro de responsabilidad civil, pero más importante si cabe es contar con una formación específica en primeros auxilios en niños y bebés para saber reaccionar ante cualquier situación de riesgo.
Un título que cada año tenemos que refrescar
Y vamos más allá. Cada año refrescamos conocimientos sobre RCP, vendajes, botiquín, atragantamientos, convulsiones febriles y, en definitiva, circunstancias varias a las que nos podemos enfrentar como adultas únicas con 4 niños/as a nuestro cargo.
Este fin de semana, he participado en un curso online de refresco organizado por la Red Madres de Día e impartido por un profesional del SAMUR. De una forma amena e interesante he vuelto a recordar todos los conocimientos.
Y recordar es importante no solo porque de un año para otro podemos olvidar lo aprendido (por suerte en la mayoría de los casos no tenemos que ponerlos en práctica) sino porque las formaciones se van actualizando y siempre es fundamental saber las últimas novedades en primeros auxilios.
En definitiva, que para ser madre de día, uno de los requisitos fundamentales que se exige es la titulación de Primeros Auxilios, que hay que refrescar anualmente.
Sin embargo, en mi opinión, no solo las madres de día deberíamos estar formadas y preparadas para salvar vidas.
Espero que este post os haya hecho reflexionar…
Comparte Primeros auxilios, un compromiso de las madres de día para salvar vidas en tus Redes Sociales
También te puede interesar...